Cuando la regulación suma...
por Federico Rodríguez Aguiar

Cuando la regulación suma...

La regulación del juego -a nivel internacional- en sus más diversas formas ha sido históricamente un tema escabroso. En sus inicios el juego resultaba una actividad ilegal o prohibida en diferentes países sin perjuicio de las autorizaciones que expresamente realizaban los estados mediante el dictado de normas de alcance nacional.

Hoy al analizar datos disponibles en la prensa podemos llegar a ?encontrar situaciones que van desde sistemas informales o irregulares ?de apuestas (presencial o en línea) hasta ilegalidades claras y concretas que debieran generar la intervención de las autoridades jurisdiccionales.

Tales situaciones generan varios problemas a saber: violación de la?legislación,?competencia desleal frente a los operadores debidamente habilitados, sistemas de apuestas sin los controles del estado, evasión impositiva y tributaria, posible lavado de activos, irregularidad de aportes sociales y de trabajo por dependientes, inexistencia de sistemas de auditoría y control de calidad, participación de menores de edad realizando apuestas, etc.

Al momento de cuantificar la cantidad ?de dinero que es esquivo a los diferentes regímenes de control en los diversos países de Latinoamérica y el Caribe podemos llegar a hablar de decenas y decenas de millones de dólares. Ya sea por no realizar los aportes tributarios, de rentas ?o en forma de pago de canon existe un trasiego de dinero sin ningún tipo de control estatal con los riesgos que esto genera.

Ahora bien ?cuál es la solución? ?Un sistema de regulación y control efectivo y con garantías para todos los participantes, es decir desde el público apostador con la expectativa de obtener un premio, pasando por los operadores debidamente autorizados conociendo las reglas de juego claras y transparentes, el propio estado brindando todas las garantías del caso y la sociedad toda recibiendo los beneficios económicos de una actividad legalmente establecida.

Independientemente del país que analicemos todos los gobiernos están necesitando?recursos?para desarrollar sus actividades y manejar su presupuesto. Solo con observar los titulares de los medios de prensa antes mencionados podemos rápidamente concluir que es necesario aumentar los ?ingresos con el fin de lograr diferentes objetivos como pueden ser reducción de la pobreza, mejoras en los servicios de salud?pública, crecimiento en la cobertura de educación, solo?por nombrar tres ejemplos.

Por todo los antes se?alado entiendo que una actividad regulada con normas claras y concretas genera un sistema de balance para todos los participantes los actuales y los futuros permitiendo que la industria del juego sea un generador de ingresos con objetivos compartidos por la sociedad toda.

La presente es una opinión profesional personal no implicando relación con algún país u organización.

Gambling regulation -at an international level- in its most diverse forms has historically been a difficult subject. In its beginnings, gambling was an illegal or prohibited activity in different countries without prejudice to the authorizations expressly carried out by the states through the dictation of national regulations.

Today, when analyzing data available in the press, we can find situations that range from informal or irregular betting systems (face-to-face or online) to clear and specific illegalities that should generate the intervention of the jurisdictional authorities.

Such situations generate several problems, namely: violation of legislation, unfair competition against duly authorized operators, betting systems without state controls, tax and tax evasion, possible money laundering, irregularity of social contributions and work by dependents. , non-existence of auditing and quality control systems, participation of minors placing bets, etc.

When quantifying the amount of money that is elusive to the different control regimes in the various countries of Latin America and the Caribbean, we can speak of tens and tens of millions of dollars. Whether for not making tax contributions, income or in the form of canon payment, there is a transfer of money without any type of state control with the risks that this generates.

Now, what is the solution? An effective regulation and control system with guarantees for all participants, that is, from the betting public with the expectation of obtaining a prize, through duly authorized operators knowing the clear and transparent rules of the game, the state itself providing all the guarantees of the case and society as a whole receiving the economic benefits of a legally established activity.

Regardless of the country that we analyze, all governments are in need of resources to develop their activities and manage their budget. Just by looking at the aforementioned media headlines, we can quickly conclude that it is necessary to increase income in order to achieve different objectives such as poverty reduction, improvements in public health services, growth in education coverage. , just to name three examples.

For all the aforementioned, I understand that a regulated activity with clear and specific rules generates a balance system for all current and future participants, allowing the gaming industry to be a generator of income with objectives shared by society as a whole.


This is a personal professional opinion not implying a relationship with any country or organization.

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